Entre el segundo y el sexto día después del parto, se produce la bajada de leche. Durante esos días los pechos estarán calientes, pesados y endurecidos. Esto se debe al aumento de sangre y líquidos acumulados en el tejido de soporte, y al comienzo de la producción de leche. Esta situación puede causar incomodidas, pero no debe ser motivo de preocupación, ya que es transitoria y desaparece en uno o dos días.
Cómo resolver esas molestias?
-Comenzando con la lactancia lo más pronto posible después del parto;
-Tratando de amamantar con frecuencia;
-Estimulando, antes de dar el pecho, el reflejo de bajada de leche. Podés colocar compresas tibias sobre los pechos o con una ducha de agua tibia, masajeando suavemente y con ambas manos el pezón.
-Ablandando la aréola antes de amamantar con agua tibia y masajes;
-Relajarse
Si después de amamantar los pechos siguen congestionados, puede intentarse lo siguiente:
-Extraer leche manualmente o con un extractor hasta sentir alivio, pero recordando que no es necesario vaciar los pechos;
-Colocar una compresa fría sobre los pechos para reducir la inflamación.
Consejos prácticos a la hora de amamantar
-Normalmente, los bebés maman de 10 a 15 minutos de cada lado en los primeros días. Hoy se considera que lo importante no es contabilizar los tiempos, sino comprobar que el bebé está satisfecho.
-Una manera práctica de comenzar con el proceso es ofrecerle al bebé el primer pecho y dejarlo mamar hasta que quede satisfecho. No hay que limitar la duración de la toma con el objetivo que mame del otro lado, pues esto puede hacer que se pierda de tomar leche rica en grasas, que aparece al final.
-Si después de mamar el primer pecho todavía se muestra interesado, ofrecerle entonces el segundo, sabiendo que es probable que succione menos. En la próxima comida entonces, habrá que empezar ofreciéndole ese último pecho.
-Si el bebé hace pausas muy largas mientras está succionando, empujar su mentón hacia arriba puede estimularlo.
-Si duerme mucho, pueden probarse alguinos estímulos para despertarlo, como quitarle los pañales o acariciarlo.
-Durante las primeras semanas los bebés maman cada dos o tres horas, día y noche. Ese tiempo debe calcularse desde el momento en que inicia la succión. A medida que el bebé crece, la frecuencia entre las tomas es de 3 a 4 horas durante el día y 1 o 2 veces en la noche.
-El amamantamiento durante la noche evitará la congestión mamaria y ayudará a mantener una buena producción de leche.
-Durante los períodos de crecimiento del bebé, las demandas de leche materna serán más frecuentes. Esto aumentará la producción de leche para cubrir las necesidades de esta etapa.
-Entre pecho y pecho, y al finalizar la toma, es conveniente estimular al bebé para que haga su provechito. Para lograrlo, se coloca sobre un hombro, de modo que ejerza presión sobre su pancita, a la vez que se le acaricia la espalda con movimientos desde arriba hacia abajo.
-Si el pecho está muy cargado, se recomienda extraer un poco de leche para aliviar la tensión.
Texto: Guia de lactancia BUSHI
